martes, 26 de agosto de 2014

MARTES 26 DE AGOSTO DE 2014. LECTURAS DE LA EUCARISTÍA.


LECTURAS DE LA EUCARISTÍA
MARTES 26 DE AGOSTO DE 2014
TIEMPO ORDINARIO  A. SEMANA 21
SANTA TERESA DE JESÚS JORNET, FUNDADORA.



ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 94, 6-7)
Entremos y adoremos de rodillas al Señor, creador nuestro, porque Él es nuestro Dios.

ORACIÓN COLECTA
Te rogamos, Señor, que guardes con incesante amor a tu familia santa, que tiene puesto su apoyo sólo en tu gracia, para que halle siempre en tu protección su fortaleza. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.

LITURGIA DE LA PALABRA

Conserven la doctrina que les hemos enseñado.

DE LA SEGUNDA CARTA DEL APÓSTOL SAN PABLO A LOS TESALONICENSES: 2, 1-3. 14-17

Hermanos: Por lo que toca a la venida de nuestro Señor Jesucristo y a nuestro encuentro con Él, les rogamos que no se dejen perturbar tan fácilmente. No se alarmen ni por supuestas revelaciones ni por palabras o cartas atribuidas a nosotros, que los induzcan a pensar que el día del Señor es inminente. Que nadie los engañe en ninguna forma.
Dios los ha llamado para que, por medio del Evangelio que les hemos predicado, alcancen la gloria de nuestro Señor Jesucristo. Así pues, hermanos, manténganse firmes y conserven la doctrina que les hemos enseñado de viva voz o por carta.
Que el mismo Señor nuestro, Jesucristo, y nuestro Padre Dios, que nos ha amado y nos ha dado gratuitamente un consuelo eterno y una feliz esperanza, conforten los corazones de ustedes y los dispongan a toda clase de obras buenas y de buenas palabras.

Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.

SALMO RESPONSORIAL: Del salmo 95
R/. Alégrense los cielos y la tierra.

"Reina el Señor", digamos a los pueblos. Él afianzó con su poder el orbe, gobierna a las naciones con justicia. R/.

Alégrense los cielos y la tierra, retumbe el mar y el mundo submarino; salten de gozo el campo y cuanto encierra, manifiesten los bosques regocijo. R/.

Regocíjese todo ante el Señor, porque ya viene a gobernar el orbe. Justicia y rectitud serán las normas con las que rija a todas las naciones. R/.

ACLAMACIÓN (Hb 4, 12) Ft/. Aleluya, aleluya.
La palabra de Dios es viva y eficaz y descubre los pensamientos e intenciones del corazón. R/.



Esto es lo que tenían que practicar, sin descuidar aquello.

DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO: 23, 23-26

En aquel tiempo, Jesús dijo a los escribas y fariseos: "¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, porque pagan el diezmo de la menta, del anís y del comino, pero descuidan lo más importante de la ley, que son la justicia, la misericordia y la fidelidad! Esto es lo que tenían que practicar, sin descuidar aquello. ¡Guías ciegos, que cuelan el mosquito, pero se tragan el camello!
¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que limpian por fuera los vasos y los platos, mientras que por dentro siguen sucios con su rapacidad y codicia! ¡Fariseo ciego!, limpia primero por dentro el vaso y así quedará también limpio por fuera".

Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor Dios nuestro, que has creado los frutos de la tierra sobre todo para ayuda de nuestra fragilidad, concédenos que también se conviertan para nosotros en sacramento de eternidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Mt 5, 4. 6)
Dichosos los que lloran, porque serán consolados. Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor Dios, que quisiste hacernos participar de un mismo pan y un mismo cáliz, concédenos vivir de tal manera, que, hechos uno en Cristo, demos fruto con alegría para la salvación del mundo. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, por tu inefable misericordia, has querido agregar a la Iglesia a muchos pueblos de América, por medio del beato Junípero Serra; concédenos, por su intercesión, que nuestros corazones estén unidos a ti en la caridad de tal manera que podamos llevar ante los hombres, siempre y en todas partes, la imagen de tu Unigénito, nuestro Señor Jesucristo. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Dios todopoderoso, las ofrendas que presentamos en la festividad del beato Junípero Serra, y concédenos expresar en la vida los misterios de la pasión del Señor, que ahora celebramos. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Por la eficacia de este sacramento, confirma, Señor, a tus siervos en la verdad de la fe, por la que el beato Junípero Serra nunca cesó de trabajar, dedicándole toda su vida, para que en todas partes la profesemos, de palabra y de obra. Por Jesucristo, nuestro Señor.


BREVE  EXPLICACIÓN DEL EVANGELIO
Comentario: Hno. Lluís SERRA.

Purifica primero por dentro la copa, para que también por fuera quede pura

Hoy, Jesús toma una clara actitud de denuncia: «¡Ay de vosotros (...)! ¡Ay de vosotros (...)!» (Mt 23,23.25). Su objetivo son los maestros de la Ley y los fariseos, que representan a las clases poderosas porque ejercen sobre el pueblo un dominio espiritual y moral. ¿Cómo pueden orientar a la gente si son “guías ciegos”? Su ceguera reside en la incoherencia de observar escrupulosamente los pequeños detalles, que tienen su importancia, y dejar de lado las cosas fundamentales, como la justicia, el amor y la fidelidad. Tienen cuidado de su imagen, que no corresponde con su interior, lleno de «rapiña y codicia» (Mt 23,25). Curiosamente, Jesús emplea términos relativos a aspectos económicos.

El Evangelio de hoy constituye una invitación a que las personas y los grupos más relevantes de las comunidades cristianas, es decir, sus guías, hagan un examen de conciencia. ¿Respetamos los valores fundamentales? ¿Valoramos más las normas que a las personas? ¿Imponemos a los demás aquello que no somos capaces de cumplir nosotros mismos? ¿Hablamos desde la suficiencia de nuestras ideas o desde la humildad de nuestro corazón? Como decía Helder Cámara: «Quisiera ser un charco de agua para reflejar el cielo». ¿Ve la gente en sus pastores hombres de Dios, que distinguen lo accesorio de lo fundamental? La debilidad merece comprensión, la hipocresía provoca rechazo.

Al escuchar el Evangelio de hoy podemos caer en una trampa. Jesús dice a los maestros de la Ley y a los fariseos que son hipócritas. También los había sinceros. Nosotros podemos pensar que este texto se puede interpretar actualmente para los obispos y sacerdotes. Ciertamente, como guías de las comunidades cristianas, tienen que estar atentos para no caer en las actitudes que Jesús denuncia, pero hay que recordar que todo creyente —hombre y mujer— puede alojar en su interior un “fariseo ciego”. Jesús nos invita: «Purifica primero por dentro la copa, para que también por fuera quede pura» (Mt 23,26). La espiritualidad tiene las raíces en el interior del corazón.



HOMILIA
Fr. Nelson Medina, O.P
Temas de las lecturas: Conservad las tradiciones que habéis aprendido * Llega el  Señor a regir la tierra * Esto es lo que habría que practicar, aunque sin descuidar  aquello. 

1. Un Llamado a la Serenidad 
1.1 Hoy parece indudable que la primera predicación cristiana insistía con mucha  fuerza y con mucho entusiasmo en el pronto retorno de Cristo como Señor del  Universo. Entendían estos cristianos que la proclamación de la victoria del  Resucitado no es sencillamente el comienzo de un nuevo orden visible, como si un  genio del derecho se pusiera a reorganizar la sociedad o como si un brillante  filósofo nos diera las claves de una vida feliz. La noticia de la Resurrección es más  bien la declaración del breve tiempo que resta antes de que todo lo visible  comparezca ante Cristo, ya no como Salvador sino como Juez. 
1.2 Con ese contexto comprendemos que una cierta prisa de amor llevaba a  algunos de los primeros cristianos a anhelar el retorno de Jesucristo con tal  intensidad que ciertas señales de su tiempo les parecían ya los preliminares de la  gran manifestación del Señor. Las cosas llegaron al extremo de crear cierto  nerviosismo o expresiones de fanatismo en algunos que vivían demasiado atentos a  cualquier mensaje o profecía que fuera en la dirección de sus deseos. Pablo, que  como creyente tanto anhelaba el retorno de Jesús, se vio en el deber de sosegar los  ánimos, como vemos en la primera lectura de hoy. 
1.3 Aprendemos de estos hechos que el amor no puede adormecerse con  mediocridad pero tampoco puede exaltarse con nerviosismo. nuestra esperanza es  grande y, por grande, serena. 

2. Cristo Indignado 
2.1 Los versículos que ayer y hoy hemos encontrado en el evangelio tienen una  impresionante carga de indignación y de reprensión. En pocos lugares del Nuevo
 Testamento encontramos a Cristo tan indignado y tan acerado en sus palabras  como en este capítulo 23 de san Mateo. 
2.2 Hay razón, desde luego, para ese enojo, y, puesto que toda palabra de Cristo  es enseñanza sus discípulos, aprendamos, hermanos, de este enojo del Señor, así  como en otras ocasiones hemos querido aprender de su sonrisa, su abrazo o su  ternura. 
2.3 La razón fundamental de tanto castigo es la hipocresía. Y la razón para castigar  la hipocresía es que nos hace inhábiles para la conversión. Además, la mentira que  nos ciega a nuestros males igualmente nos ciega a los bienes ajenos. El resultado  es que quien no reconoce su daño se afianza en él y daña a los demás. 
2.4 Entendemos así que Jesucristo quiere erradicar del mundo la hipocresía por  amor a quienes la practican y por compasión con quienes la padecen.

(Homiletica org / Fr. Nelson Medina, O.P)


 REFLEXIÓN
Padre Julio Gonzalez Carretti OCD
Mt.  23, 23-26: Pagar el diezmo, purificar la copa, ceguera espiritual.
El evangelio, nos presenta otras dos maldiciones de Jesús a los escribas y fariseos.  (vv. 23.25.26). “Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que os preocupáis  por el diezmo de la menta…” (v. 23). La Ley mandaba pagar el diezmo de los frutos  de la tierra: el trigo, el vino y el aceite, para que el hombre aprendiera a agradecer  a Dios, como dador de la vida, y sobre todo, por la fertilidad de la tierra (cfr. Deut.  14, 22-23). Se debía entregar la décima parte de los cereales, vino y aceite para el  sostenimiento del culto y del templo. Sin embargo, los fariseos habían extendido  este precepto a todos los productos, incluso, a las hortalizas comunes, como a los  condimentos de las comidas, el anís, la menta y el comino. Jesús condena esta  actitud, porque llevaba a olvidar lo más importante de la Ley: la justicia, la  misericordia y la fidelidad a Dios. Mateo, deja en claro que lo más importante es el  amor a Dios y al prójimo, la exigencia de los profetas, de ahí derivan la justicia, que  procede de Dios y se refleja en la conducta del hombre, la misericordia, es decir,  amor de Dios con el prójimo necesitado están por sobre los deberes del culto (cfr.  Mt. 5,7; 6, 14-15; 18, 33). Lo mismo se diga de la  fidelidad de Dios hacia el  creyente que cree a sus promesas (cfr. Os.4,1s; Zac.7,9-11). Jesús, vino a darle a  la ley su sentido y plenitud; dejó de lado la interpretación farisaica. El sermón de la  montaña señala la urgencia de esa justicia superior que deben cultivar los  discípulos de Jesús, por sobre la de escribas y fariseos (cfr. Mt. 5, 20). “Ay de  vosotros, escribas y fariseos hipócritas que limpiáis por fuera la copa…” (v.25). Las  prescripciones sobre la limpieza de los vasos sagrados utilizados en el culto, los  fariseos la habían extendido a los utensilios de uso doméstico. Esto le sirve a Jesús  para hacer una reflexión sobre la pureza del corazón del hombre que cree; primero  será purificar lo interior, luego viene la pureza exterior como consecuencia de  aquella. Será la palabra de Dios, la que purifique el corazón y la respuesta dada a  esa palabra como obediencia de fe, lo que le llevará a ver a Dios en su vida (cfr. Mt.  5,8; 15,11.15.20; Jn. 15, 3; Rm. 1, 5). Todo es puro, si sale de un corazón limpio,  pero se puede volver impuro, cuando se cae en el ritualismo vacío, el mercantilismo  hipócrita ante Dios (cfr.Mt.23,15;12,34), de aquellos que ponen prácticas  marginales por sobre la ley esencial de amar a Dios y al prójimo.     Teresa de Jesús, descubre en la oración el espacio donde el Señor le descubre  tesoros de fe y humanismo, es decir, encarnar la verdad del evangelio en la vida  del orante y contemplativo. “Bienaventurada alma, que le trae el Señor a entender  verdades” (V 21,1).   
(Homiletica org / Padre Julio Gonzalez Carretti OCD)


REFLEXIÓN
LA LIMPIEZA INTERIOR
2 Ts 2, 1-3. 14-17; Mt 23,23-26
Las denuncias que formuló el Señor Jesús contra los dirigentes de Israel no han perdido vigencia, ni exhiben solo las fallas de dicha dirigencia. El fariseísmo es una actitud que renace en el corazón de cualquier creyente que pretenda apegarse escrupulosamente a las exigencias legales, estableciendo una semejanza entre preceptos accesorios y principales. Es la obediencia ciega y el legalismo puro. Es una especie de parálisis intelectual que absolutiza ciertas formulaciones de la voluntad divina como si hubieran salido de su misma boca. Es un fundamentalismo que se dispensa de buscar humildemente la voluntad de Dios en cada circunstancia. De ahí que el apóstol san Pablo invite a la comunidad de Tesalónica, a mantenerse atenta a la tradición apostólica, que es continuación genuina del Evangelio de Jesucristo, para sopesar en todo momento lo que es conforme al querer de Dios.
(www. misal com mx)


Santos
 Beato Junípero Serra, presbítero. Santa Teresa de Jesús Jornet, fundadora.
Beato Domingo de la Madre de Dios, presbítero.

Feria (Verde)


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