Yo también quedé muda, pasmada, y también a mí me hizo pensar esta niña en tantas cosas...tanto que hablamos y prometemos, no sólo en grandes cosas, también todos los días en pequeñeces...y nos falta ser coherentes, hemos perdido la conciencia del valor de la palabra. Maravilloso tu aporte, Muchas gracias, que el Señor continúe bendiciéndote! Un abrazo fuerte en Cristo y María Susana
Cierto, las acciones deben acompañar a las palabras, de lo contrario sólo serán una pérdida de tiempo, se las lleva el viento.
ResponderEliminarGracias, Marleny, por agregar ésto en tu blog.
ResponderEliminarYo también quedé muda, pasmada, y también a mí me hizo pensar esta niña en tantas cosas...tanto que hablamos y prometemos, no sólo en grandes cosas, también todos los días en pequeñeces...y nos falta ser coherentes, hemos perdido la conciencia del valor de la palabra. Maravilloso tu aporte, Muchas gracias, que el Señor continúe bendiciéndote!
Un abrazo fuerte en Cristo y María
Susana